No toda homilía logra tocar el corazón. Algunas se vuelven ecos, arqueología o sentimentalismos que no transforman. Descubre 5 estilos fallidos de predicación y cómo evitarlos para que tu mensaje sea vivo, auténtico y capaz de inspirar.
No toda homilía logra tocar el corazón. Algunas se vuelven ecos, arqueología o sentimentalismos que no transforman. Descubre 5 estilos fallidos de predicación y cómo evitarlos para que tu mensaje sea vivo, auténtico y capaz de inspirar.